BATALLA DE KRASNY BOR. 10 de Febrero de 1943, Extrarradio de Leningrado.

Krasny Bor, la batalla que enseñó a los comunistas lo que vale un soldado español.

Como todos sabemos, España no participó oficialmente en la 2º guerra mundial, el último gran conflicto armado que cambió la historia del mundo hasta nuestros días. Pero quizás esta afirmación no sea del todo cierta. Mucha gente desconoce que hubo una expedición de varias decenas de miles de "voluntarios" españoles que marcarían una página en letras de sangre y oro en la historia militar mundial. ¿Pero quienes fueron estos osados y valientes soldados? ¿que les motivó participar en una guerra ajena? ¿Donde y cual fue el resultado de sus acciones? hoy le rendimos un homenaje y damos a conocer su grandiosa historia.

La batalla de Krasny Bor, es posiblemente la mas encarnizada del siglo XX librada por un contingente español.

El 22 de Junio de 1941, en plena 2º guerra mundial, 3.000.000 de soldados alemanes apoyados por divisiones finlandesas y rumanas, atacan la Unión Soviética cruzando las lineas rusas en un frente de 2.400 kilómetros, desde el océano ártico hasta el mar Negro. Esta invasión del ejercito alemán se denominó "Operación Barbaroja". La vastedad del espacio abarcado, la falta de abastecimiento de víveres, munición y gasolina y el crudo invierno ruso hizo que la campaña alemana se estancase de lleno, empezando a retroceder tras varias semanas de lucha y soportando el incesante contraataque soviético.

En España, tras la sangrienta guerra civil (1936 -1939), el general Franco domina por completo el país, aplicando una dictadura basada en principios de unión estado-iglesia. Como respuesta a los favores bélicos que fueron prestados al bando nacional durante la contienda española, Alemania ansiaba la entrada de España en la 2º guerra mundial, apoyando a las potencias del eje (Alemania, Imperio de Japón y Reino de Italia). Así se lo hizo saber el propio Hitler en la reunión de Hendaya el 23 de Octubre de 1940.

Dudoso con el resultado final de la contienda, Franco era reacio a una intervención militar directa ya que no buscaba un alineamiento con el eje de cara la opinión y políticas internacionales. Fue entonces cuando su fiel ministro, Serrano Suñer, propuso la creación de una brigada falangista de voluntarios para cumplir con Alemania y así no entrar oficialmente en la 2º guerra mundial. Se convocó entonces un reclutamiento masivo en las grandes ciudades españolas bajo el eslogan "Rusia es culpable, lucha contra el comunismo". La recepción fue masiva y las motivaciones para unirse fueron muy diversas. Algunos eran fanáticos falangistas que realmente odiaban al comunismo, otros buscaban una escalada social, algunos simplemente huir de la miserable vida tras la guerra y algunos otros, ex soldados del bando republicano, se les conmutaría las penas por participar en la división. Entre 1941 y 1943, cerca de 50.000 soldados españoles participaron en diversas batallas. A cargo del general de división Muñoz Grandes, salieron en trenes desde Madrid, cruzando la Francia ocupada hasta la base militar alemana de Grafenwöhr, donde recibieron sus uniformes, instrucción e hicieron el Juramento al Führer, pasando a ser, para los alemanes, la 250º división de infantería del ejército alemán.

Equipamiento soldado de la División Azul.

El viaje a Rusia fue duro y a pie realizaron más de 800 km dirección a Moscú donde prestarían servicio. A su paso por Polonia y a diferencia de los serios y estrictos soldados alemanes, los españoles en su estilo galán y afable de vida, no dudaron en relacionarse e intercambiar mercancías con los residentes lugareños de los pueblos que cruzaban, incluso judíos, dejando a un lado toda distinción de raza y prejuicios sociales. Esto fue algo que a sus aliados alemanes no les pareció del todo correcto y tras varios informes a Berlín sobre la falta de disciplina de la división española, Hitler les cambió su ruta y les mandó a Nóvgorod, al norte de su destino inicial con el objetivo de defender y evitar que cayese en manos rusas tanto la carretera como el ferrocarril que comunican Moscú con Leningrado. Esta es una de las canciones que cantaba la división:

Soldados de la División Azul.

De las diversas batallas que libraron los héroes españoles, cabe destacar la que se dio en la localidad de Krasny Bor el 10 de Febrero de 1943, con Emilio Esteban Infantes ya al mando de la división. Sin subir el termómetro a mas de -25º y sobre un suelo totalmente nevado, 5900 españoles equipados con armamento ligero (metralletas, fusiles, granadas y minas anticarro) hicieron frente a 44 000 soldados soviéticos del Ejército Rojo, repartidos en cuatro divisiones, y apoyados por gran cantidad de artillería, tanques y aviones. Sobre el papel, la victoria rusa estaría asegurada. El ataque soviético provocó 2252 bajas españolas en un solo día. A las 6:40 de la mañana, la artillería soviética lanzo durante mas de 2 horas, decenas de miles de obuses, con una cadencia de 1 disparo cada 10 segundos. Seguido realizaron varias pasadas de bombardeos desde aviones rusos sobre las posiciones españolas que defendían sus puestos. Subestimando y dando por echo que las tropas españolas estarían totalmente mermadas, la infantería rusa en masa, apoyada de tanques, se abalanzaron sobre las líneas españolas. El suelo helado que tras los proyectiles quedo echo un lodazal hizo que los tanques no pudiesen avanzar . Además la infantería se desplegó en hilera avanzando sobre el barro muy lentamente y confiados. Los cráteres dejados por la artillería fueron aprovechados rápidamente por los españoles, que armaron sus ametralladoras MG-34 masacrando a balazos las hileras de tropas soviéticas. En pocos minutos, el lodazal era un campo sembrado de cadáveres. Con los tanques atascados, los españoles aprovecharon escaramuzas para prenderlos con cócteles molotov.

Soldados españoles en la trinchera.

Pese a las numerosas bajas, los rusos rompen el frente español por 3 zonas. Las tropas españolas aguantan hasta el último cartucho y sin munición, contraatacan con las bayonetas. Las divisiones españolas en la retaguardia de la 1º línea, consiguen reducir el impacto del avance soviético, llegando a retroceder tan solo 3 kilómetros. Ya dentro de la urbe en Krasny Bor, se lucha calle por calle y casa por casa encarnizadamente, siendo las bajas muy elevadas en los dos bandos. La 250º División, a costa de terribles pérdidas, había conseguido frenar en seco la ofensiva del 55.º Ejército soviético en el frente de Krasni Bor. Incrédulo Stalin ante las noticias de la humillante derrota frente a los españoles, no tiene mas remedio que suspender la Operación Estrella Polar y el cerco sobre Leningrado no se rompe, cumpliendo así la División Azul su objetivo.

España tuvo un total de 2.800 bajas entre 1.125 muertos, 1.500 heridos y 200 prisioneros.

La Unión Soviética encajó más de 10.000 bajas entre muertos, heridos y desaparecidos.

El sargento Salamanca participó en la batalla. Cayó herido y sufrió cautiverio en Rusia durante once años, como prisionero. Cuenta de 1º mano lo acaecido en un documento audiovisual de enorme valor.

Tal fue la gesta española que el General de Artillería Jürgens, Comandante General del XXXVIII Cuerpo de Ejército de la Wehrmacht proclamó: ”Si en el frente os encontráis con un soldado mal afeitado, sucio, con las botas rotas y el uniforme desabrochado, cuadraos ante él, es un héroe español”.

El retroceso continuado de Alemania en la guerra y las amenazas internacionales de Estados Unidos y Gran Bretaña, hizo que Franco mandase retirar las tropas del frente el 12 de octubre de 1943. Se consideraba entonces la División como algo de lo que había que deshacerse lo antes posible. Independientemente de los ideales o motivos de los integrantes de la división, siempre quedará su valentía y coraje en la historia, como los grandes héroes que fueron.